Patologías de Hombro

El Manguito Rotador se compone de un grupo de 4 músculos con sus tendones que rodean la cabeza del húmero. Su función es sujetar firmemente la parte superior del brazo dentro de la cavidad profunda del hombro, manteniéndolo estable a la hora de realizar movimientos en las distintas direcciones. Las lesiones del Manguito Rotador son comunes y ocurren en su mayoría por desgaste crónico por movimientos repetitivos, traumatismos o degeneramiento del tejido por la edad. En cualquiera de los casos, las fibras se dañan y se producen lesiones que generan rigidez, inestabilidad y dolor. Es una patología que se da con mayor frecuencia en pacientes de avanzada edad o deportistas de contacto.

Síntomas

Las lesiones del Manguito Rotador suelen presentarse con un dolor agudo o rigidez en el hombro, que imposibilita el movimiento. El dolor podrá sentirse en actividades como:
  • Acostarse sobre el hombro lesionado.
  • Levantar su brazo o bajarlo al frente o al costado.
  • Estirar su brazo detrás de su espalda.
Otros síntomas que pueden surgir debido a un manguito rotador desgarrado son:
  • Pérdida de fuerza en el brazo.
  • Sonidos de crujidos al mover el brazo.

Tratamiento

Muchas personas se recuperan con ejercicios de fisioterapia que mejoran la flexibilidad y la fuerza de los músculos que rodean la articulación del hombro. Algunos desgarros pueden requerir de un procedimiento quirúrgico. Las lesiones pueden presentarse de forma aguda o como un proceso crónico. La cirugía para repararlo normalmente se realiza como procedimiento ambulatorio, con una artroscopia o método mínimamente invasivo. Conozca más acerca de las soluciones de Fergus para reparaciones de Manguito Rotador: SpinFit PK, Knotix PK y Knotix Ti.
El hombro se mantiene en su cavidad por unos elementos llamados estabilizadores, presentes en la articulación, con la finalidad de mantener la cabeza del húmero adosada a la cavidad glenoidea de la escápula. Uno de ellos es el labrum glenoideo, que consiste en un anillo de fibrocartílago que rodea la cavidad glenoidea y mantiene la coherencia entre ambas estructuras articulares. Se produce una inestabilidad cuando la cabeza humeral sale de la cavidad glenoidea de la escápula, produciendo una luxación en los casos de una salida total y una subluxación cuando la salida es parcial. Esto puede generar lesiones en el labrum glenoideo, causando su desgarro total o parcial o su desprendimiento de la cavidad glenoidea. Estas lesiones se generar debido a un traumatismo localizado o a movimiento repetitivos, generalmente relacionado a pacientes jóvenes que practican deportes de contacto. Las lesiones más frecuentes que suceden son:
  • Arrancamiento del Labrum y de los ligamentos glenohumerales de la escápula, llamada lesión de Bankart.
  • Alargamiento de los ligamentos del hombro por un estiramiento forzado que provocará su laxitud.
  • Fractura importante del margen de la cavidad glenoidea.

Síntomas

Los pacientes notan dolor en el hombro al tomar determinadas posiciones, en ocasiones chasquidos y también puede tener sensación de que la articulación se sale del sitio. El hombro se vuelve inestable en varias direcciones: anterior, inferior y/o posterior. Algunos pacientes pueden tener también los tejidos estabilizadores muy laxos por una condición congénita.

Tratamiento

Los pacientes lesionados precisarán una rehabilitación que fortalezca los músculos rotadores del hombro, así como de los músculos periescapulares. En caso de que el tratamiento rehabilitador no brinde el resultado deseado, se les aconsejará una reparación quirúrgica de la inestabilidad, de forma artroscópica o a través de cirugía abierta clásica. Conozca más sobre los productos Fergus para reparación de Inestabilidad de Hombro: QuickFit PK, SpinFit PK, Knotix PK y Knotix Ti.

El bíceps humeral es el principal músculo del brazo, que tiene dos inserciones: distal y proximal. En la parte proximal, comprende un tendón que tiene dos terminaciones, la cabeza corta y la cabeza larga. Ésta última recorre la parte superior de la cabeza humeral y la comprime contra la cápsula glenoidea, aportando estabilidad a la articulación.  

 

El daño de esta estructura puede darse por traumatismos, sobrecargas o movimientos repetitivos, provocando dolor o pérdida de fuerza. Cuando esta estructura se daña, el músculo se comprime y genera una prominencia llamada “brazo de Popeye”.  

 

Ante esta situación, pueden realizar distintos procedimientos, uno de ellos es la tenodesis, que consiste en la implantación de un tendón a un hueso, en el lugar en donde el mismo se desprendió o en uno diferente al original. La Tenodesis del Bíceps puede realizarse vía artroscópica mediante un sistema de fijación del tendón en distintas zonas del húmero. 

 

Situaciones en las que se puede presentar una Tenodesis de Bíceps:

  • Preruptura del tendón.
  • Luxación o subluxación del tendón del bíceps de la corredera humeral.
  • Atrapamiento intraarticular por una hipertrofia de la porción larga del bíceps en el contexto de tendones del manguito rotador preservados.
  • Una Tenodesis del Bíceps puede sumar también una reparación artroscópica del manguito de los rotadores o junto a un desbridamiento de un manguito de los rotadores no reparable.

Síntomas

Principalmente, los pacientes encontrarán un dolor agudo en el área del hombro y pérdida de funcionalidad.

Tratamiento

Se recomienda una intervención quirúrgica mediante la implantación del tendón al hueso, debido a la inexistencia de tratamientos preventivos que mejoren la calidad de vida del paciente.

 

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